Aladino frustrante
Estoy en un estación de trenes, sentado en un banco bastante viejo pero cómodo. La estación está casi vacía. Puedo palpar la calma, el olor del café del jefe de la estación. Mis ganas de fotografiar las locomotoras, los vagones, las traviesas, los rieles, los detalles de la madera envejecida del andén y del reloj que ya no indica la hora.
Me he escapado del trabajo, me he tomado el día remolcado por el sol quebradizo y el frío que invita a esconderse dentro del abrigo. La cámara que se mueve contenta entre mis manos y mis ojos. Con calma para observar, para fotografiar. Todo menos el aroma del café del jefe de estación y ese sol quebradizo. Y el frío.
Alguien pide un deseo.
Y como una pluma caigo suavemente sobre la silla de mi trabajo. Mi cara se ilumina por el brillo del ordenador. Hay una hoja de excel vacía delante de mi. Y un olor penetrante de café de máquina y papel recién impreso.
Justo lo que deseaba: regresar, como fulminado, a través de túneles y andenes hasta caer sentado aquí a tu lado.
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12 comentarios
carlos -
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guisante -
sabes? creo que alguien debería diagnosticar esta "enfermedad" de querer plasmarlo todo en la camara. Tal vez deberíamos cambiarnos los ojos. Todo va tan rapido que ellos ya no alcanzan a ver la rapidez ni del tren, ni del metro, ni de los millones de detalles, gestos, olores, texturas que hay en nuestro alrededor. Y nos quedamos cortos, incluso, a veces con el click.
Deberían parar el reloj.
Eride -
¡ERIDE! ¡Despierta, que estabas en Babia otra vez!
eh?
Te cambio a tu Aladino por el loro metrosexual.
Nuala -
Y no, lo de pab no se pega: lo tienes o no. Se llama talento. ;)
carlos -
ai, ¿quiénvaadormirmalestanoche?
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carlos -
¿y.eso.q.és?
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(SOS: servicio comunitario, visto que Nepomuk no suele entrar dos veces al mismo post, por favor que alguien me sugiera alguna respuesta a su postdata. Gracias.)
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Nepomuk -
\"¡ahivadiós se me cayó la cámara al andén! ¿¿por qué no me fui a fotografiar el Retiro coñioooo?? bueh...pues hala. P\'al trabajo otra vez...\"
Y luego se sentó en su silla ñiguili-ñuguili parsimoniosamente, y desenrollando la bufanda del pescuezo, escribió:
\"Alguien pide un deseo.\"
PD. ¿no te da un poco de miedo pasar por el síndrome Pablix?
nadie -
vireta -
(me gusta....!!)
Nuala -
carlos -
!chas!
(***)
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Nuala -
No tiene gracia, no.
Al final la culpa es nuestra por no saber formular unn deseo. Siempre nos quedarán las fórmulas del Excel.