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Spica *

Amigos Cherry

juanita
juanito

valió la pena rebuscar entre 5 kilos de cerezas, para encontrarles y unirles para siempre.

juanito cherry "el raro", y juanita cherry "la impoluta".

las otras 200 cerezas asistirán al convite, encantadas y sonrosadas.

las semillas, por favor colocadlas escupidlas en el recipiente dispuesto para tal fin.

la historia de juanito y juanita es muy dulce.

empalagosa.

*

9 comentarios

guisante &co. -

jjiji sí, esos son los parientes repudiados! los típicos a los que sólo ves en bodas y comuniones. Pero nos hacen quedar fatal a toda la familia... La abuela Guis aun no se ha recobrado del susto!! ;)

carlos -

si, ya me enteré que los guisantes piraños llegaros muy gamberros y se comieron todo lo que pillaban... y se pusieron hartos de vino.

hay fotos!!!
todas en verde.

*

guisante -

corroboro:

hartar harta lo suyo

-nuala dixit-

guisante -

otra vez aparecen en escena juanito y juanita cherry, eh?

veo que cada vez que compres cerezas NOSOTROS esclavos de tu blog, lo sabremos!!

pues ale ale que vivan las cerezas!!!

yo fui a la boda... claro, chéee, soy pariente!!!!!

Nuala -

Y añado: I wanna have it aaaaaaall, yeah yeah... Cherry Lee :p

Es que Dover casi me pega más que Madonna.

sá -

Siempre he soñado, desde pequeña, con tener una cereza del tamaño de una sandía. Mmmmmm.

Nuala -

esteeeee que gracias, pero que puesto a enviarme un kilo de algo que sea de pasta (money money should be so funny in a rich man's wooooorld), farlopa o cualquier sustancia que permita trapichear con ella para sacarle un beneficio económico. Gracias por vuestra colaboración.

(I'm a material girl, in a material world, ya sabes.)

carlos -

Nuala,
de los 5 kilos, te enviaré 1.

el comentario lo merece.

igual, me quedan 3 kilos para repartir.

hoy no sé que me ha dado en el mercado que he dicho: "toda esa caja, amiga mía, para éste que ve aquí"... sólo me ha faltado terminar con un TRACATrÁ, meterme un par de cerezas en la boca, sin pedir permiso.

*

Nuala -

Pues yo no sé por qué al ver tus cerecitas felices, he recordado esa escena de The War (me gusta mucho esa película) en la que la profesora les pide a los niños que hagan una redacción sobre por qué su vida es como un cuenco de cerezas.

Y una niña negra que tiene una vida de mierda, se levanta y le explica a la profesora moviendo la cabeza como un pájaro mientras le cuenta, no, mejor, le ESCUPE como si fueran los huesos de esas cerezas, porqué su vida NO es como un cuenco de cerezas. La profesora que calla asombrada por la reacción de la niña, intenta castigarla, y su mejor amiga sale al quite diciendo: "¿por qué? Acaba de decirle la verdad más grande que conoce".
Y le da la mano a su amiga y se marchan las dos con la cabeza muy alta.

Porque ellas saben que la vida no siempre es como un cuenco de cerezas. No tiene azúcar glasé, y de empalagosa tiene bien poco. Aunque hartar, harta lo suyo.