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Spica *

Cubicuidad

Cubicuidad Esta
es
la
historia
de
un
cubo

que
quiso
ser
esfera

a
los
35
años
abandonó
su
sueño

y
se
dedicó
a
recordar
cuando
era
un
cubo
perfecto
nadar
en
mares
de
mercurio

3 comentarios

Carmen -

Cuando era pequeña me encantaba que se rompieran los termómetros. Un mar de mercurio es algo demasiado inmenso para imaginármelo

Nuala -

Vaya, ¡he cambiado el destino de un cubosfera!.

Va a tener razón Neil Gaiman: "Nuestra existencia deforma el universo. ESO es responsabilidad."

Y da pelín de miedo.

Nuala -

Un cubo perfecto que aspiraba a ser una esfera, que a su vez es un símbolo universal de perfección...

Pues a mi me gusta más este cubo escheriano que no es como ningún cubo, ni como ninguna esfera. Todas esas sinuosidades tienen una historia que contar. Incluso un cubosfera de estas características, tan peculiar, puede encajar si encuentra el medio adecuado. Si yo fuera este cubo soñaría con nadar en mares de mercurio.

Dejar de soñar, de mirar hacia el futuro, para ponerse a nostalgiar, mirando al pasado, es hacerse viejo. Y eso, no tiene nada que ver con la edad.

Yo sueño.