Fumar a escondidas
La primera vez que vi a Margarita me llamó la atención el color nacarado de su piel, sus ojos violeta y (para qué negarlo) sus bonitos tobillos.
Yo era un chico de unos 20 años que lo único que le pedía a la vida era tener buen criterio para descubrir manos con carácter y bonitos tobillos.
La segunda vez que vi a Margarita fue en el Zoo cuando ella paseaba con sus tres hijos y su marido. Todos radiantes, alineados y perfectos.
Margarita era una mujer de 44 años que lo único que le pedía a la vida era tener buen criterio para educar a sus hijos y una estrategia para esconder a su marido que fumaba a escondidas.
La tercera vez que vi a Margarita iba descalza exhibiendo unos tobillos espectaculares, con un pitillo en la mano y con una sonrisa de chica de 20 años en su rostro. Fue la última vez que la vi, pero sus níveas manos estuvieron lo bastante cerca de mis ojos como para descubrir un tenue color amarillo en sus dedos que delataba que le gustaba fumar a escondidas.
Un secreto bien guardado.
*
Yo era un chico de unos 20 años que lo único que le pedía a la vida era tener buen criterio para descubrir manos con carácter y bonitos tobillos.
La segunda vez que vi a Margarita fue en el Zoo cuando ella paseaba con sus tres hijos y su marido. Todos radiantes, alineados y perfectos.
Margarita era una mujer de 44 años que lo único que le pedía a la vida era tener buen criterio para educar a sus hijos y una estrategia para esconder a su marido que fumaba a escondidas.
La tercera vez que vi a Margarita iba descalza exhibiendo unos tobillos espectaculares, con un pitillo en la mano y con una sonrisa de chica de 20 años en su rostro. Fue la última vez que la vi, pero sus níveas manos estuvieron lo bastante cerca de mis ojos como para descubrir un tenue color amarillo en sus dedos que delataba que le gustaba fumar a escondidas.
Un secreto bien guardado.
*
14 comentarios
saravá -
ivan -
Mai -
Patricia -
En los tobillos, a veces, aunque como no me gustan los míos...
ivan -
saravá -
vergonzoso -
Isthar -
Nepomuk -
(v) i r e t a: -
si, me avergüenzo
Nuala -
evam -
(v) i r e t a -
pero tu tienes criterio? pues eso es q no lo tienes....
Nuala -
Yo ahora, desde que me he mudado de nuevo a la casa paterna, fumo destrangis, que no es exactamente lo mismo que fumar a escondidas. De día me bajo a la calle y de noche, cuando estoy sola, hago pausas para fumar por la ventana. Y mientras lo hago me entretengo observando lo que pasa en la calle (porque siempre pasa algo si tus ojos están bien entrenados). Después vuelvo con una nueva pequeña historia que he ganado a cambio de renunciar a un poco de libertad.