Fe
Este es la historia de Salomón.
Un salmón que luchaba contracorriente. Como todos los salmones. Lo hacía bastante bien ya que era persistente y muy habilidoso; y día tras día su afán de seguir río arriba era ejemplo de otros salmones ya cansados del viaje y su destino.
Resultó entonces que una nueva corriente de pensamiento sugería que los salmones deberían ir contracorriente. O en otras palabras, en el sentido del fluir del río. ¿lógico no?. Y revolucionario, por supuesto.
Esta teoría dio paso a la segunda era de Acuario. Acuario de salmones pensaban todos sin decir palabra.
En todo caso los efectos no se hicieron esperar, dando paso a un caos general dentro del cardumen. Salmones que iban y venían en perfecto desconcierto, otros detenidos en el lecho del río pensando que hacer, algunos incluso que pescaron en río revuelto sacando un vil provecho de la situación.
Pero Salomón siguió adelante, creyendo en su naturaleza, y haciendo oídos sordos de teorías y ríos que te mecían hasta tu destino. Y siguió empeñado, modificando su fisonomía, siempre río arriba, esforzado, ciego de fe.
Fue entonces cuando en un recodo del río un oso se lo comió.
Un salmón que luchaba contracorriente. Como todos los salmones. Lo hacía bastante bien ya que era persistente y muy habilidoso; y día tras día su afán de seguir río arriba era ejemplo de otros salmones ya cansados del viaje y su destino.
Resultó entonces que una nueva corriente de pensamiento sugería que los salmones deberían ir contracorriente. O en otras palabras, en el sentido del fluir del río. ¿lógico no?. Y revolucionario, por supuesto.
Esta teoría dio paso a la segunda era de Acuario. Acuario de salmones pensaban todos sin decir palabra.
En todo caso los efectos no se hicieron esperar, dando paso a un caos general dentro del cardumen. Salmones que iban y venían en perfecto desconcierto, otros detenidos en el lecho del río pensando que hacer, algunos incluso que pescaron en río revuelto sacando un vil provecho de la situación.
Pero Salomón siguió adelante, creyendo en su naturaleza, y haciendo oídos sordos de teorías y ríos que te mecían hasta tu destino. Y siguió empeñado, modificando su fisonomía, siempre río arriba, esforzado, ciego de fe.
Fue entonces cuando en un recodo del río un oso se lo comió.
22 comentarios
Nuala -
Pero que no todo era oro, que también tragábamos muuuuuucha cutrez, y Manzanita, y Mocedades, y el Vaquilla y el Torete y después los Snoopy, y la peña hablando como si le faltaran tres hervores.
Y las hombreras, no te olvides de las hombreras, pol dió, pol dió...
saravá -
No hay derecho, que mala leche con el pobre Salomón. Ala, me identifico y no me da la gana que me coma un oso.
y los 80, Nuala, nos dieron a Nacha Pop y los Smiths que no es poquito.
en cuanto a Hair es brutal, yo empiezo a oir la musiquilla y me levanto a bailar, aunque por generación me caiga lejos.
Carlos -
Nuala -
Supongo que aún hay salvación para mí. :D
Nepomuk -
Mira que confundir Hair con Jesucristo Superstar..como un huevo y una castaña Nualita.
Jesucrisssssst...superstarrrrrr..
Nuala -
(Digan lo que digan cualquier tiempo pasado NO fue mejor. Los 70 fueron infames. Y los 80 también.Que no todo eran los Doors, los Ramones o Golpes Bajos. Estaban María Jesús y su acordeón, Modern Talking y el Esteso cantando aquello de la Ramona.)
Carlos -
Nepomuk -
Hala. Mira que peazo de poesía sensible te he dejado con la colaboración de el cíclope ese. Currada ¿eh? para que luego digan por ahí que no tengo sensibilidad.
(el tono rosita lo dan los pescados acostumbrados a mucho movimiento, Lord Jim, porque tienen mucho más reflujo de sangre) Hala. Además de poesía currada, observe el populacho la cultura que derrocho, ea. Si es que soy la hostia, ya lo digo yo y nunca me creéis..
El Cíclope Tuerto -
ivan -
un saludo. y mi mas sincera felicitacion por este post.
Isthar -
¿O sea que si nadamos contracorriente se nos comen los osos?
(v) i re t a: -
Patricia -
Y debería haber en el mundo más como Salomón, aunque su final no haya sido muy bueno
Carlos -
Eres un solete!
(v) i re t a -
pero si q me gusta el salmón Salomón... me ensnata el y su nombre aunque acabara en la tripa del oso Ramón
tienes lo q me pediste...
Carlos -
Menos salmón comeré ahora.
Lord Jim -
Por cierto, ¿sabéis que la mayoría de los salmones que comemos son de criadero y que les alimentan con unas porquerías terribles para teñirlos de ese color rosado tan característico? Al parecer, cuando un salmón no se mueve en toda su vida, vive con otros doscientos salmones en un metro cúbico de agua y se le alimenta con piensos artificiales, su color no es rosita.
Yo prefiero la suerte de Salomón.
Nuala -
Carlos -
Nuala -
Por lo menos a Salomón no lo ahumaron. :)
Carlos -
(Esa BBC y sus documentales)
miss guisante -
Qué tal Spica? Un buen día, no? Umhhh,...
Vi en un reportaje que al final de su recorrido los salomones aquíferos, después de aparearse, del agotamiento se van muriendo se pudren y al final ni los osos los quieren comer. Qué triste eh? Al menos este fue un buen bocado: jugoso, tierno, salomónico.